Isaías 12:4-5.
Quizás hoy mismo estés pasando por la mayor prueba de tu vida y creas que la situación o el sentimiento de pérdida nunca cambiará, que siempre estará ese dolor o esa angustia en tu corazón. Quizás hoy mismo te estés preguntando porqué sentís que las promesas de Dios no se cumplen en tu vida. Mirás alrededor y ves que todos avanzan, pero vos no, te sentis estancado. Tu mente y tu corazón no te permiten ver mucho más allá de lo que pasa día tras día. Levantarse, ir a trabajar, ir a estudiar o al gimnasio, volver a casa y otra vez lo mismo.
Este es sólo un tiempo en el desierto. Un tiempo dónde Dios quiere mostrarte algo que no podría mostrártelo en otro momento. Es un tiempo para estar con Él. En este tiempo de soledad, deja que sea Dios tu consejero, tu amigo y tu confidente. Sólo Dios, nadie más. Él se revelará a tu vida como en ningún otro momento y llenará cada vacío o pérdida que está en tu corazón.
Si bien parece que son los momentos más horribles que puedas pasar en la vida, un día mirarás atrás y los recordarás como los mejores momentos de tu vida con Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario