Capacitados para restaurar - Jay E. Adams
Capitulo 10: Análisis bíblico del problema.
Para un análisis bíblico del problema es preciso utilizar las categorías bíblicas porque existen categorías que pueden conllevar un perjuicio o una manera no bíblica de pensar.
Caso Midge: Un cero a la izquierda
Midge es una chica trabajadora, de 23 años, soltera. Se graduó de un college bíblico y ahora es secretaria en una misma escuela. Midge se describe así misma como con “frecuencia deprimida, tímida y solitaria. No soy nada, me siento inferior”. Dice que ora con frecuencia, pero lee la Biblia solo de vez en cuando.
Tal como ella lo ve, su principal problema es: “el concepto que tengo de mi misma es que soy un cero absoluto. Esto es posible que le sorprenda, pero es así. Toda mi vida ha sido un cero a la izquierda. Nadie me nota, nadie me quiere, no le intereso a nadie. Lo mismo que si estuviera muerta. Me siento muy inadecuada. Incluso cuando oro no puedo encontrar alivio. Probablemente ni aún el Señor me quiere. Pero Él es el que me hizo así, así que quizás me quiere así.
La mayoría de los consejeros modernos dirían que el problema de Midge es un problema con la imagen del yo. El concepto de sí misma es pobre y necesita “estimular el yo”, posee un complejo de inferioridad. Hay que ayudarla a recuperar el sentido de su propio valor. Si buscáramos en su pasado, seguramente descubriremos que ella se ha ido rebajando paulatinamente. Esto puede ser considerado como la causa de su problema. Sin embargo, este análisis es deficiente y señala hacia la dirección equivocada. Se pasa por alto que muchas personas que han sido rebajados por sus padres o pares no hayan desarrollado los mismos problemas. Este tipo de análisis no es bíblico, no sirve de mucho y nos puede llevar a lugares equivocados. No dan esperanza porque no hay manera de aumentar la autoestima de la persona. Incluso Midge ha adoptado este línea de pensamiento porque se piensa así misma en términos de inferioridad. Como consejero es preciso ayudarla a ver el problema de modo diferente, a pensar su problema en categorías bíblicas.
Es importante notar que Midge señala que como los otros no han satisfecho sus necesidades amándola, cuidándola, ella es incapaz de hacer nada en la vida. Las categorías no bíblicas que ha usado Midge para analizar su problema no ayudaron mucho.
¿Cómo deberíamos ver este problema según las categorías bíblicas?
En su Palabra, Dios nunca menciona que no podemos obedecer ni resolver nuestros problemas a menos que nuestras necesidades hayan sido resueltas. Dios trata a todos sus hijos por igual, dándoles las mismas órdenes y poniendo los mismos estándares, sin considerar que uno haya nacido en una familia cristiana donde le han enseñado las escrituras desde pequeños o si uno ha nacido en una familia pagana sumida en la idolatría, la prostitución, la mentira, etc. Las categorías bíblicas poseen un resultado diferente, un resultado esperanzador, porque pertenecen a Dios.
Es importante tomar en serio la evaluación negativa de sí misma: “no soy nada... toda mi vida es un cero a la izquierda” Es preciso hacer notar que la vida es importante porque viene de Dios. “Perder la vida que Dios te dió de esta manera es una verdadera tragedia.” Es preciso también poner el énfasis que el problema radica en ella, no en los demás o en la vida misma. Esto se puede llevar adelante con preguntas tipo “¿en qué crees que has fallado en la vida?”
Es preciso también contrarrestar otras afirmaciones suyas que no tienen que ver con hechos sino con sentimientos o valores. Esta es la única manera de analizar debidamente la situación, honrar a Dios y darle esperanza y dirección que le permita hacer algo sobre el problema que tiene.
Además es preciso corregir sus afirmaciones sobre sentirse inferior e inadecuada (no encajo en esta situación), indicando que ni la inferioridad ni la adecuación son sentimientos. Uno no se siente inferior o inadecuado. Midge se siente mal porque se ha juzgado con categorías no bíblicas, como inferior e inadecuada. Los malos sentimientos fueron ocasionados por un incorrecto juicio sobre los hechos. Es preciso preguntarnos si el juicio que ella hace de sí misma es correcto o incorrecto. Sólo así podremos ayudarla a volver a examinar y evaluar los hechos en los cuales está basando su juicio. Si la inferioridad o la inadecuación fueran sentimientos, no podríamos hacer nada con ellos, ya que un consejero no puede cambiar los sentimiento.
Además, cuando vemos un lenguaje exagerado (“nadie...”) y vemos que echa la culpa a otros (incluso a Dios), su resentimiento hacia otros y su conmiseración y egocentrismo, descubrimos dónde se hallan alguno de los problemas reales de su vida. No tiene problemas a causa de su baja autoestima sino que tiene baja autoestima a causa de pautas de una vida pecaminosa, obstinada y las dificultades no resueltas que lo han ocasionado. El problema no es un mal concepto de sí misma, ni un mal tratamiento que le hayan dado otros. Más bien es un yo malo y un mal tratamiento suyo hacia otros. Midge ha tergiversado el principio bíblico; en vez de perderse a sí misma a causa de Cristo y su Evangelio, está buscando su propia satisfacción. De esta forma la satisfacción nunca llegará. La satisfacción es un resultado derivado, no es algo que se puede buscar y hallar directamente. No es extraño que se sienta desgraciada, nunca ha aprendido que “más bienaventurado es dar que recibir” Midge quizás inconscientemente piensa “si los demás fueran mejores conmigo, sería mejor” Esta manera de pensar es equivocada. Sin duda, es probable que haya sufrido muchas injusticias por parte de otras personas, pero no es el problema que ella tiene. Su problema radica en la forma equivocada en la forma que ha respondido frente al daño que otros le pudieron haber ocasionado. Necesita dejar de cargar la culpa en otros y la busqué en sí misma: es aquí donde está verdaderamente la responsabilidad del cambio.
El análisis bíblico es sincero, directo y estricto (incluso severo), pero es preciso. Por eso es capaz de dar esperanza, de producir un cambio a través del arrepentimiento y llevar a un nuevo estilo de vida. El concepto de baja autoestima hace precisamente lo opuesto. El problema de Midge es el pecado, y hay que decírselo. Los conceptos no bíblicos, como baja autoestima, solo oscurecen la cuestión, creando excusas para el pecado y orientando el pensamiento en direcciones equivocadas. Midge necesita que le digan la verdad.
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